Quilinic el Diario

Vertiginosos días ha tenido esta semana el diputado por nuestro distrito, Gabriel Silber (DC), y es que cuando todo parecía expedito para concretar su primera asunción a la presidencia de la cámara de Diputados de su carrera política, un par de cartas anónimas distribuidas a los mails de algunos parlamentarios en las que se denunciaba un supuesto caso de violencia intrafamiliar por parte del honorable hacia su esposa, luego de eso, se empezaba a complicar el escenario para Silber y la bancada Demócrata Cristiana.
“A veces la política es con llorar” declaraba el Diputado, quién el día miércoles acompañado de su esposa presentaron una denuncia en dependencias de la PDI por lo que se define como delitos de acción pública, sin embargo, la discusión de fondo a nivel ciudadano es la relevancia que puede llegar a provocar un documento anónimo, más aún, cuando es capaz de producir variaciones en los procesos democráticos de una nación. Como consecuencia negativa adicional, el acercamiento que habían logrado los del partido de la “flecha roja” con los representantes del Frente amplio se ha congelado momentáneamente con todo el retroceso que eso significa para las pretensiones de una oposición bastante dividida.
En estricto rigor, a la fecha no hay evidencias concretas que respalden las acusaciones de violencia mencionadas en los correos, aun así, el diputado decidió renunciar a la opción de presidir la cámara ante esta situación que él mismo definió como “operación política deleznable, que refleja lo peor”. Lo que nos queda para pensar ahora es que en el futuro sigan llegando este tipo de documentos anónimos que puedan seguir provocando mella en la democracia de nuestro país… Que opinan ??